El Consorcio de Santiago acaba de licitar el servicio de conservación y restauración del cortavientos de la puerta principal de la capilla de San Roque, situada en la calle Santa Clara, por un importe de 22.000 euros. Las empresas interesadas tienen de plazo hasta el 19 de febrero para presentar sus propuestas. Se prevé un período de ejecución de seis meses.

Este cortavientos de madera fue diseñado por el arquitecto Domingo de Andrade, maestro de obras de la catedral de Santiago. Ea una pieza singular por la riqueza de su talla y única por su cronología y autoría. En su proceso constructivo intervinieron diferentes artífices vinculados a la fábrica de la catedral compostelana.

Para su restauración podría ser necesario desmontar la carpintería de madera de castaño, con el fin de recuperar sus elementos ornamentales y herrajes en mal estado. Se pretende eliminar la capa de barniz existente con el fin de restablecer la capa de policromía original. Así, se reintegrará la superficie policromada, para lo cual se emplearán pigmentos naturales. Por otro lado, se aplicará un tratamiento antixilófagos, con el fin de solventar los ataques actuales y prevenir los futuros.

Una pieza de gran valor histórico y artístico, ornamentada con motivos jacobeos

La profesora de Historia del Arte de la Universidad de Santiago de Compostela Mª del Carmen Folgar de la Calle realizó un estudio histórico de esta pieza de gran valor histórico y artístico. Tal como se recoge en este estudio, los orígenes de la capilla de San Roque están relacionados con las consecuencias de una peste, que, en tiempos del arzobispo Alonso III de Fonseca, asoló la ciudad de Santiago a finales del año 1516.

Debido la que en 1775 se iniciaron obras en la fachada, se considera necesario el ensanche de la puerta principal y la colocación de un cortaventos, que se precisa “para preservar de polvo y ayres la capilla y sus retablos”. Su instalación se demoró hasta 1781.

El cortavientos acota en la entrada de la capilla un pequeño espacio, a modo de portal o zaguán. Ornamentado con motivos jacobeos, procede de la catedral de Santiago y está datado a finales del siglo XVII. En otra época formó parte de las puertas del crucero de la catedral.